Hola hola viajeros! el día de hoy les vengo a hablar sobre la  hermosa ciudad de Chiang Mai al norte de Tailandia, pero antes que nada un pequeño RECAP para ponerlos en contexto:

Mi viaje por Tailandia tuvo una duración de 2 semanas y estuvo organizado de la siguiente manera: Bangkok – Khao Sok– Krabi– Chiang Mai – Bangkok. Este itinerario se realizó así por conveniencia en los costos de los vuelos internos, pero tú lo puedes realizar como prefieras, de norte a sur o de sur a norte.

Si vas a realizar un viaje por Tailandia te invito a leer los posts de todas estas ciudades los cuales ya están disponibles en el blog.

Ahora si, Chiang Mai.

Después de mucho sol, playa, arena y medusas en Krabi, volamos al norte del país directo a Chiang Mai, otra de las ciudades populares de Tailandia y déjame decirlo, una visita obligada. Es uno de los lugares que mas me gustó y al cual sin dudas tengo ganas de volver.

En Chiang Mai se puede encontrar muchas cosas: mercados nocturnos, algunos de los templos más importantes y bonitos del país, santuarios de elefantes (OJO: hay que validar que en realidad son santuarios y no parques de explotación animal), el mejor transporte público de las ciudades que visité y como no: los mejores masajes que he probado.

Chiang Mai me dejó una sensación muy particular, es una ciudad con tantas cosas por ver y hacer pero muy relajada a la vez. Tiene una vibra entre lo caótico de una gran ciudad y lo tranquilo de un pueblo pequeño. No sé como describirlo, pero sin duda su ambiente te envuelve. Puedo decir que como ciudad fue una de mis favoritas en Tailandia e incluso, hubo algún momento en el que sentí que vivía (o que podría vivir) ahí. Además, es una ciudad que se encuentra muy cerca de Chiang Rai, otra de las ciudades más populares de Tailandia y de la cual les hablaré más adelante.

CELEBRACIONES LOCALES: YI PENG Y LOY KRATHONG

Mi primera impresión al llegar a la ciudad fue: wow, que bonita! y no era para menos, ya que llegamos en las vísperas del Yi Peng, una celebración anual que se lleva a cabo durante el mes de noviembre, durante la luna llena. Esta consiste en soltar linternas de papel al cielo, es una tradición que representa el dejar ir el pasado, atraer la buena suerte y los nuevos comienzos.

Como parte de esta tradición, la ciudad entera se viste con vistosas lámparas de colores que al anochecer se encienden, dándole un look totalmente bohemio y luminoso a la ciudad. Al ser esta la primera impresión, no fue raro que me enamorara de Chiang Mai.

Seguramente en alguna ocasión haz visto fotos donde se ven miles de lámparas en el cielo, ah! pues eso es el Yi Peng, y aunque es una tradición más propia de China o Taiwán, Tailandia también lo celebra, aunque únicamente en el norte del país, siendo Chiang Mai la ciudad principal y donde se lanza el mayor número de linternas.

A la par de esta festividad también se celebra otra muy popular y la cual a diferencia del Yi Peng se celebra en todo el país a lo grande: el Loy Krathong.

Esta tradición consiste en soltar unos barquitos de madera llamados “krathongs” que la gente hacen navegar por los ríos y canales de su ciudad como una señal de ofrenda durante la luna llena y que marca el inicio de una nueva etapa. Están hechos a mano con hojas de plátano donde se ponen incienso, velitas, flores, fruta, entre otros elementos.

Como podrás ver, una de las festividades se centra en el agua, y la otra, en el cielo.

Las fechas de estas 2 celebraciones cambian cada año de acuerdo al calendario lunar, pero la mayoría de las veces solo están a algún par de días de diferencia.  A nosotras solo nos tocó ver el Loy Krathong.

Debo decir que todo esto que les cuento lo aprendimos por casualidad. Cuando llegamos a Chiang Mai no teníamos ni idea de que estaba pasando y que estaba por celebrarse. Fue una lástima que nos enteráramos de esto demasiado tarde y nos perdiéramos el espectáculo de las linternas, ya que no había vuelos disponibles para quedarnos un día más al Yi Peng.

Si vas a viajar en noviembre te recomiendo investigar la fecha para que planees tu visita en torno a estas fechas, va a ser un espectáculo único que estoy súper segura que vale la pena. Si yo con lo poco que vi, quedé fascinada!

TRANSPORTE

El transporte de Chiang Mai fue mi favorito, son los llamados songthaew, y son las camionetas tipo pick up con asientos a los lados. No sé si era el calor, pero definitivamente se me hacía un transporte bastante práctico, fácil de subir y  bajar, con sombra, buena ventilación, y donde puedes ir viendo el paisaje, además de que hay muchísimos por toda la ciudad. Me encantaba pasearme en ellos.

Te recomiendo moverte en estos mucho más que en los tuk tuks, que resultan bastante caros a comparación.

ACTIVIDADES

Chiang Mai es una ciudad relativamente pequeña pero con mucho por hacer. Dependiendo de la cantidad de días que vayas a estar puedes elegir lo que más te interese, sin embargo estas son mis recomendaciones:

Visitar un night market: sin duda visitar los mercados nocturnos es una parte imperdible de Chiang Mai. Hay varios, pero uno de lo más populares es el que se pone los domingos en el centro histórico. Aquí encontrarás de todo: comida, artesanías, souvenirs, masajes y música. La verdad es que yo no soy mucho de comprar souvenirs cuando viajo, y sin embargo, aquí me volví loca! Había cosas padres muy bonitas y a muy buen precio. Además, no te puedes perder los masajes en estos puestos ambulantes que se ponen en este night market, nos hicimos fans!

Si resulta que estás un domingo en la ciudad, no te lo puedes perder!

Tomar un masaje: definitivamente esta fue nuestra ciudad favorita para disfrutar de los famosos masajes tailandeses (tomamos varios), son muy baratos y encuentras establecimientos prácticamente en cada cuadra.

 Si no coincides con el bazar nocturno del domingo, puedes entrar al establecimiento que más te llame la atención ya que hay muchísimos. Otro día nosotras visitamos uno llamado Friend Thai Massage que también nos gustó mucho, muy muy recomendados!

Caminar por su centro histórico: esta es la parte antigua de la ciudad y lo más bonito, se encuentra rodeado por una muralla que en la antigüedad se utilizaba para proteger la ciudad de los ataques birmanos.

Ahí encontrarás muchísimos restaurantes, centros de masajes y yoga, tiendas de ropa y souvenirs, se disfruta mucho caminando o en bicicleta.

Visitar sus hermosos templos budistas: hay muchísimos (más de 300!) y cada uno es único y con sus características propias. Algunos de los más importantes y que no puedes dejar pasar son:

Wat Phra Singh

Es uno de los templos más visitados de la ciudad y uno de los más bonitos. Su característica principal es la enorme estupa dorada que resalta en medio de todos los edificios del complejo, y aunque es lo más llamativo, la importancia del templo radica en el Phra Singh Buda, una estatua de Buda muy venerada.

Costo: 20 baht – 0.65 dlls

Wat Chedi Luang

Este templo, al igual que el anterior, se encuentra dentro de la zona amurallada de la ciudad. Sufrió graves destrozos durante un terremoto en el año 1545, y no fue hasta 1991 que se decidió reconstruirlo, aunque aún tiene algunas partes en ruinas. Destaca por su arquitectura típica del norte de Tailandia y porque por algún tiempo albergó el Buda más importante de Tailandia, el Buda Esmeralda, el cual actualmente tiene su propio templo en Bangkok.

Costo: 40 baht – 1.30 dlls

Wat Phra That Doi Suthep

Este es el templo más importante de la ciudad y también el más alejado. Es un punto muy importante de peregrinación en el norte de Tailandia y una visita obligatoria. Se encuentra en una montaña y para llegar ahí primero tienes que dirigirte al zoológico de Chiang Mai para después tomar un songthaew que te lleve directamente a la entrada.

Una vez en el templo tendrás la opción de subir los 309 escalones o tomar un funicular para llegar a la cumbre. Desde aquí, se pueden obtener hermosas vistas de la ciudad de Chiang Mai.

Costo: 30 baht (+ 20 baht funicular, opcional) -1.62 dlls.

Visitar Chiang Rai: aquí encontrarás dos de los templos más impresionantes de nuestro recorrido y de los más populares de Tailandia: Wat Rong Suea Ten y Wat Rong Khun, mejor conocidos como el templo azul y el templo blanco respectivamente.

Ambos templos son únicos en su tipo y relativamente nuevos, son las atracciones principales de Chiang Rai.

Wat Rong Khun/ Templo blanco

Este templo deslumbra desde el primer minuto. Su impresionante diseño hecho a base de espejos y del color blanco representan la iluminación y pureza del Buda. Es un templo que rompe con todo lo que es un templo tailandés tradicional, y que, a pesar de lo impactante que se ve, aún no está terminado. Se empezó a construir en 1997 y se especula que para el 2070 estará acabado en su totalidad.

El proyecto nació con el propósito de atraer turismo a la ciudad, algo que al día de hoy ha logrado indudablemente, hasta llegar a ser el punto de referencia para muchos de esta ciudad e incluso del país entero.

Costo 50 baht – 1.62 dlls

Wat Rong Suea Ten/ Templo azul

A diferencia del templo blanco, el templo azul, es una construcción que se realizó con el propósito de adorar y rendir culto a Buda y que sigue todas las líneas de los templos tailandeses tradicionales. Es un templo muy nuevo que abrió sus puertas en 2016 y que se diferencia del resto por su intenso color azul que prevalece en todo el diseño. La entrada es gratuita y es otro de los templos imperdibles en Chiang Rai.

Costo: entrada gratuita.

Para llegar a Chiang Rai lo puedes hacer en autobús, en nuestro caso lo visitamos en un viaje de ida y vuelta, pero si lo prefieres puedes destinar quedarte una noche para conocer los templos tranquilamente. El viaje entre estas dos ciudades es de 3 horas aproximadamente y cuesta 129 baht (4.18 dlls) por la compañía de autobuses Green Bus.

Como verás, tanto Chiang Mai como Chiang Rai tienen mucho para ofrecer y seguro que después de conocer un poco de ellas querrás incluirlas en tu visita a Tailandia. No te pierdas mi próximo post (y último de Tailandia) en el cual te platicaré sobre Ayutthaya y como llegar desde Bangkok, nuestra última parada por el llamado (y con justa razón), el país de las sonrisas.